Que el agua es transparente lo tenemos ya más que claro. Pero la pregunta ahora es:
¿hay agua de colores?
Álvaro dijo que había agua azul pero Ainhoa dijo que nada de colores.
Investiguemos...
Para eso tenemos un taller de experimentos casi casi mágico.
Sólo necesitamos vasos transparentes para ver todo lo que va sucediendo, agua y papeles de celofán de colores. Ponemos un trocito de papel en cada vaso y el resultado es ¡asombroso!.
Tenemos agua de colores pero ¡cuidado! no lo podemos beber las personas. Se la podemos echar a las plantas o jugar con ella.
Investigación completada. "Hay agua de colores sólo cuando juguemos con ella. No encontraremos agua de colores en grifos, botellas..."
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